¿Cómo se puede viajar a la Antártida?

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¿Cómo se puede viajar a la Antártida?

La Antártida es un continente que nunca ha tenido población indígena o sea nada de humanos nativos. O sea nadie puede considerar hogar dulce hogar a la Antártida. No existen industrias comerciales, ni ciudades, ni residentes permanentes. Las personas que están allí o bien son científicos o bien son turistas. 

Los científicos utilizan las bases científicas y estas son las únicas estructuras que podrían considerarse de alguna forma «asentamientos» porque albergan residentes por un gran tiempo que va desde meses hasta 2 años. Hay 66 bases científicas, 37 de las cuales están ocupadas durante todo el año y las restantes permanecen abiertas durante el verano y cerradas durante el invierno.

Con respecto a los turistas las cifras de la temporada 2016-17 muestran que hubo más de 44.000 visitantes. Hace 10 años había un poco más. La caída se debe al hecho de que los barcos grandes ya no pueden visitar la Antártida por el riesgo en derrames de combustible.

Los turistas solo pueden pasar un tiempo relativamente pequeño en tierra. La mayor parte del tiempo permanecen en sus cruceros esto es para evitar un gran impacto en el ecosistema. Hay una empresa que te lleva en avión sí,  pero es en jet privado, así que ya te imaginarás que no es nada barato. La empresa se llama White Desert y te transporta hasta allá con todo tipo de comodidades. El vuelo se realiza con un avión privado intercontinental Illuyshin 76 desde Ciudad del Cabo a través del océano del Sur para aterrizar en la pista de hielo de la Antártida. Su exclusivo campamento está formado por varias tiendas de campaña de lujo que funcionan con energía solar y eólica, y están hechas de paneles de fibra de vidrio resistente a los fuertes vientos de la Antártida. 

Entonces como turista sí puedes ir, pero igual no te va a resultar fácil. Varias personas quieren ir allá por ser una experiencia única y el acceso está limitado por el Tratado Antártico. Que es también el que gobierna la Antártida. El continente en sí no le pertenece a nadie. El tratado involucra a varios países y establece los derechos de soberanía en el Artículo IV, el cuál dice lo siguiente. «Ningún acto o actividad que tenga lugar durante la vigencia de este Tratado deberá constituir una base para afirmar, respaldar o negar un reclamo de soberanía territorial en la Antártida o crear derechos de soberanía en la Antártida. Ningún reclamo nuevo, o la ampliación de un reclamo existente de soberanía territorial en la Antártida se hará valer mientras este tratado Tratado esté en vigor».

Entonces, nadie gobierna la Antártida por lo que si deseas organizar tu propio viaje o expedición, deberás solicitar permiso del gobierno de tu propio país. Tendrás que demostrar que serás completamente autosuficiente y que tienes una muy buena razón para querer ir, que tendrá poco o ningún impacto ambiental, tendrás que mostrar exactamente cómo lo harás. Si no puede hacer estas cosas, se le denegará el permiso y estarás infringiendo la ley (de tu propio país) si vas y te quedas más de lo que se te permite igual. 

Y qué hay si eres un científico puedes ir, claro pero además del trámite con tu país. Debes solicitar el trabajo desde antes de ir allá. En realidad no puedes mudarte a la Antártida, encontrar un lugar para vivir y luego encontrar un trabajo, conocer a alguien, casarte, comprar una casa, tener hijos, enviarlos a la escuela, iniciar tu propio negocio, jugar en un campeonato local de fútbol, ni postularte para alcalde. 

Para más sobre la Antártida ver este interesante video de El Robot de Platón.

 

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