Nueva vacuna promete avances en el tratamiento contra uno de los cánceres más agresivos

Publicado el
Nueva vacuna promete avances en el tratamiento contra uno de los cánceres más agresivos

El glioblastoma es uno los tipos de tumor más agresivos que existe / Wikimedia Commons

Una innovadora vacuna personalizada para el glioblastoma, el tipo de cáncer cerebral más agresivo y letal, ha logrado prolongar la vida de pacientes en un ensayo clínico sin precedentes, según un estudio publicado en Cell. El tratamiento fue desarrollado para activar el sistema inmunitario permitiéndole reconocer y atacar el tumor.

El glioblastoma se caracteriza por su rápida progresión y resistencia a los tratamientos convencionales como la quimioterapia, radioterapia y cirugía, donde los pacientes generalmente viven alrededor de seis meses sin avance de la enfermedad. 

Sin embargo, con esta nueva vacuna, uno de los pacientes logró ocho meses de supervivencia sin progresión y otro nueve meses. Por otro lado, un tercer paciente vivió nueve meses adicionales tras una recurrencia del glioblastoma.

«En menos de 48 horas, pudimos ver cómo estos tumores pasaban de ser ‘fríos’ —con pocas células inmunitarias y una respuesta inmune muy silenciada— a ‘calientes’, con una respuesta inmune muy activa», explicó el oncólogo Elias Sayour de la Universidad de Florida. Este cambio rápido sugiere una potente activación del sistema inmunitario en las etapas iniciales, clave para desencadenar efectos más duraderos y efectivos.

Tecnología conocida

La vacuna se administra en dos o cuatro dosis, provocando una significativa y rápida activación inmunológica y resultando en efectos secundarios a corto plazo, como náuseas, fiebre baja y escalofríos, que suelen desaparecer en uno o dos días. Estos síntomas son típicos de una respuesta inmunitaria y fueron observados poco después de la administración de la vacuna.

Uno de los principales desafíos del tratamiento del glioblastoma reside en su capacidad para protegerse del sistema inmunitario, creando un entorno tumoral inmunosupresor. La nueva vacuna aborda este problema reprogramando dicho entorno utilizando ARN mensajero del propio tumor. Este enfoque no solo alerta al sistema inmunitario sobre la presencia del invasor sino que también modifica el tumor para facilitar su ataque.

El diseño de la vacuna, basado en la misma tecnología que las vacunas contra el COVID-19, pero con diferencias clave, implica la inyección de «grupos de partículas que se envuelven entre sí como cebollas», en palabras de Sayour. Este método parece alertar al sistema inmunitario de manera más efectiva que las partículas individuales.

Buenos resultados

Los resultados prometedores del ensayo en humanos se construyen sobre un estudio previo realizado en 10 perros con tumores cerebrales, donde la vacuna incrementó la tasa de supervivencia media de 35 a 139 días

«Esto podría ser un nuevo paradigma para el tratamiento de pacientes», señaló Sayour, quien se muestra optimista sobre la capacidad de esta tecnología para integrarse y potenciar otras terapias inmunológicas.

El equipo de Sayour ahora se enfoca en determinar la dosificación óptima y la frecuencia de administración de la vacuna, buscando el equilibrio entre los resultados positivos y los efectos adversos mínimos. Este avance podría abrir nuevas puertas en el tratamiento del glioblastoma y posiblemente otras formas de cáncer.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *